COLUMNA N°7: ¿Da para “huevoneta” o mantenemos la calma?

Fotografías: César Narváez – Miguel Zamora

Lo del titulo de la columna es por la “moda” de que a todo equipo exitoso le colocan “neta” al final del apellido del entrenador, como si fuera un medio de transporte al que los hinchas se suben (ejemplo más cercano, la “Scaloneta” de la selección Argentina tras los éxitos de Lionel Scaloni como su entrenador, o la “Liraneta” en los tiempos de Patricio, que llevó a Temuco a tres liguillas de ascenso consecutivas) lo que Luis Santibáñez en plena época del mundial de España 82 denominaba “el carro de la victoria”. En el caso del Pije, por el apodo de su DT en su época de jugador.

Han pasado 15 días desde la última columna. Por razones de mesura (y tiempo) no había podido expresar en palabras los últimos partidos de Deportes Temuco. Empezando por un sorprendente triunfo 0-1 como visita ante Limache (el que ni el más optimista de los Albiverdes esperaba), pasando por un trabajado triunfo (1-0) como local ante el hasta ese día, cuarto del torneo, Magallanes (con un hombre menos durante 21 minutos) y finalizando con el encuentro de ayer ante Antofagasta en el cual el Pije enganchó por primera vez en el año tres triunfos consecutivos y una cosecha de 10 de 12 puntos posibles en lo que va de segunda rueda.

¿Milagro deportivo? ¿Trabajo duro por parte de Valencia? ¿Efecto del psicólogo deportivo con el que trabaja el Club?  ¿Da para subirse a la “huevoneta”? Acá viene otra pregunta ¿Por qué mejor dejar de cuestionarse tanto y disfrutar de los triunfos? La respuesta viene desde la frialdad del analista que constantemente pisa la vereda del hincha: los seguidores de Deportes Temuco tienen todo el derecho de celebrar, de ilusionarse con la liguilla, incluso de subir a primera división a final de año. Los años en medios de comunicación me han hecho ver que uno no tiene ninguna facultad para pedirle a los hinchas esto o aquello. Por el contrario, es materia de los comunicadores mantener la calma dentro de los contextos futbolísticos, lo que tampoco implica hacer relaciones publicas o evitar las polémicas.

Dicho lo anterior, podemos ver algunos puntos favorables de la “era Valencia” que en esta segunda rueda están dando réditos.

El primero, mantener formaciones constantes: en los últimos 4 partidos, solo hubo una modificación: la salida de Espinoza en la oncena titular de ayer por expulsión ante los albicelestes.

Dos: encontrar laterales acordes a su idea de juego. Villegas se recuperó a tiempo y Peñailillo, a pesar de sus falencias en la marca, da más seguridad que los anteriores. De seguir fogueándose, estimo que Agustín debería estar peleando palmo a palmo titularidad (o consolidarse en ella) por el sector diestro el 2025 ante la llegada de un lateral consolidado. Lamentablemente esta temporada los grandes damnificados hasta ahora son: Sobarzo y López por la banda izquierda; y Neculhueque con Lavín por la banda derecha.  

Tres: el alza de los uruguayos. Tras un primer semestre para el olvido, Camilo Núñez y Matías Abisab están en un buen momento de su rendimiento. No da para sobresalir, pero si para darle equilibrio en el medio campo a la idea de Valencia.

Cuatro: jugar de chico a grande. Lo escribí hace algunas columnas atrás. A Temuco no le sobra nada y tenía que conseguir puntos como fuera. Y para ello, cuando ha tenido que replegarse, lo hace. Quizá peligrosamente como ante Limache y Antofagasta, pero con inteligencia y en busca de cuidar el resultado. Con un primer semestre como el que se tuvo (uno de los peores futbolísticamente hablando del último tiempo) no hay bielsismo ni guardiolismo que resista. Solo el Bilardismo en estado puro.

Cinco: el mejor del año, Yerko Urra. El portero hasta ahora sería el mejor de los mejores. Ayer en el norte tapó tres tiros a quemarropa, manteniendo el cero. Mi primer renovado para el 2025 sin pensarlo dos veces.

Faltaría un sexto factor, externo eso sí: el contexto de los demás rivales. Tanto San Marcos, Limache, Magallanes y Antofagasta no se encontraban en sus mejores momentos, viéndose muy imprecisos y poco mortíferos en el área. Si los encontrábamos en otro momento, quizá no habría racha favorable. Antofagasta anoche aprovechó varios forados en defensa que tanto la avivada de Peñailillo o la impericia de Larenas no permitieron transformarse en gol.

Considerando lo anterior, se abre una nueva etapa para Temuco en el campeonato. Ante la falta de solidez de San Felipe y la pérdida de puntos de Curicó, el fantasma del descenso se empieza a alejar por el retrovisor. Al mismo tiempo que se vienen dos rivales complejos: Wanderers como local y Rangers como visita. Del mismo modo se vienen  partidos con equipos que muestran diversos presentes: Morning, San Felipe y Curicó. En esos cinco partidos, Temuco se juega la opción de ilusionarse con fundamentos por un lugar en la post temporada o solamente navegar tranquilos en el mar de la categoría hasta final de año.

Finalmente unas palabras para el nuevo refuerzo, el uruguayo Diego Sánchez Richieri, tiene 25 años recién cumplidos, diestro, 1 metro 81 centímetros de estatura. Debutó en el Juventud de la segunda división uruguaya el año 2020, jugando 7 partidos y marcando un gol. Al año siguiente no registra partidos en el ascenso uruguayo. Para la temporada 2022 es cedido al Central Español (también del ascenso uruguayo) jugando 20 partidos y marcando solo dos goles. Ese mismo año parte al Sud América charrúa, de la misma divisional, equipo en el que el año pasado jugó 31 partidos y marcó 6 goles. Finalmente, este año arribó al Uruguay Montevideo donde disputó 16 partidos y marcó 6 tantos. Claramente es una apuesta, que esperamos sea a ganador. Le deseamos éxito…y goles.