PDI; Campaña Preventiva “Juega, Diviértete Y No Te Pierdas”

Desde enero a septiembre del 2015, la Policía de Investigaciones de Chile, PDI, ha recibido 8.438 órdenes de investigar por presunta desgracia, de las cuales 312 corresponden al segmento Infantil (rango etario de 0 a 9 años). Se debe considerar que en la Región de La Araucanía durante el mismo periodo de tiempo se registraron 14 órdenes de investigar. Considerando estas estadísticas, la PDI desarrolló durante el presente mes una campaña a nivel nacional orientada a prevenir estos hechos, denominado “Juega, Diviértete y No te Pierdas”, que tiene por finalidad prevenir el extravío de niños y niñas.
Cabe precisar que el término “Presunta Desgracia”, representa la pérdida o el extravío, temporal o permanente, de una persona natural, de quien se ignora su paradero y a quien le podría haber ocurrido una desgracia (sea esta física o psíquica). En términos jurídicos, no se encuentra clasificada como figura penal, por lo tanto no constituye delito.
Los riesgos o causas del extravío son distintos a los que afectan al resto de la población. Si en los adolescentes o adultos la mayoría de los casos son abandonos voluntarios del hogar por algún tipo de conflicto asociado a su ciclo vital, en la presunta desgracia de los más pequeños el factor que más incide es el conflicto de los padres por su custodia. Sin embargo, ese no es el único ni el principal riesgo a que están expuestos. Con frecuencia los más pequeños se alejan de los adultos que los cuidan, por lapsos que van desde unos pocos minutos hasta algunas horas, generando situaciones de mucha angustia.
Ante el extravío de una persona tras desconocer su paradero, la denuncia debe ser presentada lo antes posible. Se recomienda también llamar a todos los familiares y amigos más cercanos para ver si el desaparecido ha tenido algún contacto, y también llamar o concurrir a todos los lugares que frecuenta. En el caso del extravío de un niño o niña, la PDI recomienda hacerlo de inmediato.
Es muy importante actuar preventivamente para evitar estos hechos, donde es fundamental reforzar las medidas de precaución en los dos grupos más vulnerables, entre los cuales se encuentran los menores de 7 años, las personas de la tercera edad y, muy particularmente, en el segmento etario en el que porcentualmente se registra la mayor cantidad de estos casos: los adolescentes.
Es importante asumir el deber de cuidado, principalmente respecto de los menores y adolescentes, y también actuar responsablemente con nuestros adultos mayores, manteniendo siempre la debida preocupación y vigilancia. Esto no solo es parte de la responsabilidad que debe observarse dentro del núcleo familiar. Una actitud solidaria y colaborativa a nivel comunitario también puede contribuir a la prevención de la angustiante experiencia del extravío de personas.
José Luis López Leiva
Prefecto Inspector
Jefe IX Región Policial De La Araucanía