PDI Rastreará Posibles Cadáveres En Predio Que Ocupaba Secta De Vilcún

Personal especializado con apoyo canino de la PDI. rastreará los terrenos del fundo Santa Ana de Vilcún en busca de cadáveres, de personas que se encuentran desaparecidas en la zona. Diario de actividades, de la secta apolítica que rendía culto a una niña de 11 años, es pieza clave en la nueva línea investigativa, tras formalizar a los 8 integrantes por asociación ilícita, porte y tenencia ilegal de armas de fuego.
Nuevos antecedentes aparecidos en una Bitácora de actividades que desarrollaba la secta integrada por ocho personas tres de ellas mujeres de un grupo familiar que rendía culto a una niña de 11 años que era denominada “La Princesita” por sus visiones angelicales, se encuentra desarrollando el fiscal del caso Omar Mérida, estas dicen relación con la inhumación ilegal de un cadáver que se realizó por los integrantes de la secta en el kilómetro 1 de la ruta Cajón Vilcún, donde residían los cuidadores del fundo Santa Ana. “Se va a investigar la inhumación ilegal de cadáveres, hay algún antecedente que indica la muerte de alguna persona al interior del recinto. No hemos podido determinar su identidad y por lo mismo no se ha podido determinar si efectivamente esa persona falleció y donde se encuentra sepultada. Lo que hay es un antecedente de una persona que falleció, cuyo nombre no esta determinado y que va ha requerir de la presencia de personal especializado en la búsqueda de cadáveres en el recinto”, puntualizó el fiscal Mérida.
Al terminó de la audiencia de formalización donde se decretó la prisión preventiva para los cinco varones de la familia Baeza, por un periodo de cuatro meses y el arresto domiciliario nocturno de las mujeres la líder de la secta Verónica Baeza explicó que su hija, es la vidente del grupo y lo demostrará próximamente, señalando “que les voy a mentir, si tiene el don de Dios. De El Dios todopoderoso que esta en el cielo, porque ella es una hija de Dios. No les puedo decir cual será la sorpresa para vos”.
Una opinión absolutamente distinta, del culto que se practicaba en la casa de sus familiares es la que tiene Ana Flores Baeza, toda vez que dijo que tuvo que huir del lugar por temor a ser victima de un sacrificio. En este sentido, Ana Flores Baeza relató que “decían que si desobedecía me iban a sacrificar. No me dejaban salir de ahí. Me quemaron los zapatos porque eran negros, me decían que me iba a pasar algo. Que muy pronto iba a pasar algo. Que todas las gentes eran demonios y ellos eran los únicos que eran buenos. Me daba miedo, Porque mi hermano había hablado con su prima, dijeron que iba a pasar una cuestión que no iba hablar más. Dijeron que si comía carne de cerdo la iban a sacrificar, porque se iba a convertir en cerdo”.
En tanto la menor, fue alejada del seno familiar y puesta bajo la custodia del Servicio Nacional de Menores. Los 8 integrantes de la familia Baeza deben someterse a una pericia psiquiátrica a petición del ministerio público.