“Yo No Quería”: El Estremecedor Relato De Antonia Barra, La Joven Que Se Suicidó Luego De Una Presunta Violación

La Fiscalía de La Araucanía formalizará en julio por los delitos de abuso sexual y violación a Martín Pradenas, quien además es acusado de atacar a la estudiante Antonia Barra quien que, tras estos hechos, se suicidó.
La audiencia quedó fijada para el próximo 21 de julio a las 9:00 horas, donde el Ministerio Público solicitará la prisión preventiva del sujeto. Según un audio revelado por la familia -a Chilevision Noticias- que dejó la joven de 20 años, el sospechoso la habría llevado a una cabaña de Pucón donde la violó.
Luego de conocerse el caso de Antonia Barra, se conocieron nuevas denuncias en contra de Pradenas, quien ahora enfrentará cargos por cinco delitos de abuso sexual propio e impropio y violación a mayor de 14 años, ocurridos entre 2010 y 2019.
El fiscal Rojas, encargado de la investigación, agregó que «ha sido una investigación difícil, pero gracias a los aportes de las víctimas y sus familiares, además del trabajo de las pericias de la policía, nos ha permitido reconstituir lo que sucedió».
Pradenas asegura que es inocente respecto del caso de Antonia Barra, pero no fue hasta este hecho que se conocieron las nuevas denuncias.
Según los datos conocidos, todo se remonta al 18 de septiembre del año 2019, luego que el ahora imputado se contactara con Antonia tras salir de una discoteque en la zona lacustre de La Araucanía. En el testimonio que entregó la joven a una expareja, el cual ya está en manos de la Fiscalía, el acusado la habría violado.

Desgarrador testimonio
“Tú no sabes cuánto sufrí, por qué creís que llegué al punto de querer matarme esa semana, porque toda esa mierda que sentía, toda esa suciedad”, revela un extracto del audio al que tuvo acceso exclusivo el equipo de reportajes de Chilevisión Noticias.
La voz desgarrada de Antonia corresponde a un registro inédito. Es una pieza clave para aclarar la agresión de la que habría sido víctima. El día 17 de septiembre del 2019, llegó a la zona lacustre de Pucón a disfrutar las Fiestas Patrias junto a una amiga, en cuya casa alojaría. Durante la noche irían a la discoteque Sala Murano.
En la noche, Antonia se dirigió con sus amigas a la discoteque desde donde salió avanzada la madrugada. Testigos cuentan que iba en mal estado, sujetada por el individuo que actualmente es el único imputado. En ese lapso la joven no recuerda qué fue lo que ocurrió. Sólo que despertó en una cabaña que había sido arrendada por un grupo de amigos del sujeto.
“Lo único que me acuerdo fue haber, como haberme despertado y al estar como más consciente y el weón estaba arriba mío, y yo le dije “sale mierda!” y me vestí y me fui”, continúa el testimonio de la joven, quien agregó que “Tú no sabes cómo me siento (llanto), me siento sucia”.

Luego habría contactado a una amigo para que se la llevara del lugar. Dicha persona le habría dicho que denunciara la presunta agresión sexual.
La transcripción de la conversación da cuenta de que la joven prefirió no mencionar el hecho a su familia u otras personas, pero que sí habría encarado a su presunto agresor, quien le habría negado a Antonia haber cometido la violación.
“‘Me violaste’, y me dijo ¿qué wea, por qué ‘decí’ eso?”, le habría respondido el acusado a la joven, quien ya daba cuenta de haber pensado en quitarse la vida producto de los hechos mencionados.
Después del “pacto de silencio” que pidió Antonia a sus amigos, su padre, Alejandro Barra, cuenta que nunca vio nada extraño en su hija.
Todo seguía aparentemente normal para la familia, hasta que la noche del 12 de octubre Antonia recibió la llamada telefónica de un ex – pololo, con el que había terminado su relación en agosto. Según antecedentes del caso, el hombre le preguntó qué había pasado en Fiestas Patrias en Pucón y Antonia le contestó que Pradenas la había violado. La conversación fue grabada por su expololo, sin el consentimiento de ella. Luego, le entregó el registro a la familia y esta última hizo llegar la grabación a la fiscalía. Según el padre de la joven, tras la llamada de la expareja, Martín Pradenas llamó a Antonia y la amenazó. Al día siguiente, el 13 de octubre, la joven se quitó la vida.
“Al revisar su celular esa tarde, cuando llegué (a la casa), me di cuenta de una conversación por WhatsApp con su ex, en la cual ella le decía que él no se imaginaba lo que le había sucedido. Esa misma noche del domingo 13 de octubre llegaron a nuestra casa los amigos que estuvieron con ella el 18 de septiembre y nos contaron todo”, explicó su padre.
La versión de Pradenas
Martín Pradenas declaró el 14 de noviembre del año pasado y el 21 de enero del 2020 ante el fiscal Miguel Ángel Rojas: nunca reconoció haber cometido delito.
Sobre su excompañera de colegio que lo denunció por abuso en 2010, Pradenas dice que no recuerda que ella haya ido a su casa y que el testimonio es falso, porque en su hogar siempre estaban su mamá y sus hermanos.
En relación a la otra denuncia por abuso en 2013, indicó que eso no pasó, que nunca hubo un acercamiento amoroso. Sobre la violación que se le imputa de noviembre de 2018, declaró no recordar a la persona que lo denunció.
En cuanto al caso de Antonia, dijo al fiscal que la llamó el 12 de octubre (un día antes de su muerte) porque supo que se había divulgado que él había violado a la joven. De acuerdo a Pradenas, ella le contestó que no se acordaba de nada y él le hizo una reconstitución de escena, que solo se dieron besos y “agarraron”.
Su padre, Iván Pradenas, acusa a la familia de Antonia de injuriarlos e incitar el odio: “Se trata de un procedimiento judicial que se resolverá con las pruebas y la decisión de jueces. Como familia podemos entender el dolor de la pérdida de un hijo, pero de allí atribuírsela a un ataque sexual, hay mucha distancia”. Para el padre, la situación ha generado “una condena anticipada, ya que se muestra únicamente lo que se quiere mostrar, como una alegoría de una víctima y no como una joven que tomó sus propias determinaciones”.
Gaspar Calderón, abogado del imputado: al ser consultado por periodistas de latercera.com, este señaló “Lo quieren hacer parecer como un violador en serie»
Agregando “Martín Pradenas descarta la comisión de los delitos. Sus declaraciones en la investigación son coherentes con las pruebas que desmienten los hechos que se relatan en las denuncias. Todas ellas, según lo declaran las mismas denunciantes, lo hacen porque desean ayudar a una amiga o respecto de quien tiene algún tipo de cercanía. Estas denuncias laterales han colaborado mucho en convertir el hecho en una causa mediática. No se configuran los presupuestos de los delitos o abusos sexuales de estas denunciantes, todo está dentro del contexto de un consumo excesivo de alcohol, de libertades y conductas asociadas a fiestas. El caso se construyó a ciegas, sobre la base de muchas circunstancias falsas que hoy están descartadas, como que se habría tratado de un individuo que embriagó y drogó a la víctima (…), que hubo amenazas.
¿Su representado conocía a Antonia Barra? ¿En qué contexto? Antonia Barra y Martín Pradenas no eran desconocidos, formaban parte de un grupo indeterminado que se veía con frecuencia en discotecas y otras actividades, especialmente en la noche.
¿Y Pradenas conoció al resto de las denunciantes? Sí se conocían con Martín Pradenas en distintos planos. Una de ellas era compañera de colegio y otra vecina de un amigo, pero todos se ubicaban dentro del marco de las fiestas. Este elemento es determinante para comprobar que (…) se hizo llamando a sumar probables víctimas, al que concurrieron únicamente amigas directas o indirectas de Antonia Barra y de su círculo. Se sitúa dentro de un esfuerzo y estrategia para hacer aparecer al acusado como un violador en serie.
¿Cuál es la situación de su representado? Martín intenta seguir con su vida normal, trabajando en negocios familiares, cuenta con apoyo de su familia y amigos y está confiado en probar su inocencia. Él y su familia han sido víctimas de atentados directos, se grita su nombre en las calles y han puesto grafitis; una turba atacó el negocio de su hermano (…). Ha sido injuriado por los denunciantes.